¿Quien no se tentó alguna ves a probar su suerte en una maquinita come fichas que te vacía los bolsillos sin que te des cuenta?.
Parece que todo lo que nos rodea es un constante acoso tecnológico, y somos seducidos por eso que llaman entretenimiento, o acaso ¿Comemos electricidad?, tenemos que andar de puntitas de pié para que esta invasión de tecnología se quede al márgen de una simple distracción porque cuando hacemos uso de esos aparatos, sin querer terminamos haciendo de ellos una necesidad; Si claro alguien te puede decir "lo que hace mal es el exeso" y ¿quien te controla con el exeso?, porque cuando comienzas a usar una de esas herramientas que te hacen la vida más fácil y te deja tiempo para aprovecharlo en otra acción no sabes que hacer con ese tiempo y vuelves a recurrir a esa herramienta y se crea eso que le llaman círculo vicioso. Luego de horas y horas te das cuenta que eso que parecían minutos al final te absorvió mas tiempo del que podías pronosticar.
A ver... hay momentos en la vida que no vuelven más, ¿Somos capaces de dejar todo eso para volcarlo en el uso de la tecnología? pues si lo que nos facilita la vida nos convierte en dependientes, es algo que se puede discutir a favor o en contra pero las decisiones son personales.
Gracias a poder potenciar el uso de nuestras capacidades logramos ser quienes somos.
Los videojuegos están ahí esperándote, siempre habrá un modo de que te quedes enganchado pasando horas sin hacer provecho de tu tiempo, o quizás evites darle tiempo a eso que todos quieren de tí, también pudes combinar lo que te rodea para poder darte tiempo a tu vida y potenciar lo valioso que eres como persona, no se trata de mostrar a los demás lo habilidoso y temerario que eres. Hacemos de nuestras capacidades el mundo que nos rodea y tendríamos que reconocer eso que nos acompaña, para hacer de la vida un lugar mas equilibrado para tí y los que te rodean.
Los videojuegos son una forma de entretenimiento o una herramienta para ejercirtar nuestras capacidades; El mundo es intenso, variable, está contantemente cambiando sin notarlo pide respuestas al instante, estamos en él y no podemos pronosticar con exactitud hacia donde se dirige, pero si podemos tener una vision clara de los resultados que medimos con los registros que obtenemos.